EL TÚNEL. ERNESTO SABATO
“En todo caso, había un solo túnel, oscuro y solitario: El mio”
La frase popular dice “dime con quien andas, y te diré quien eres” pero en ocasiones debería ser “dime qué lees y te diré quien eres”. En el mundo hay varios tipos de personas, pero por ahora, haciendo uso de la conveniencia que mueve al mundo, digo que en el mundo están los que leyeron a Sábato (al menos un libro, no hay por qué ser tan estrictos) y los que no.
Ernesto Sabato y su libro el túnel presentan a lo largo de sus páginas una concepción muy propia de la existencia, del ser, las palabras adentran al lector en un territorio denso y vertiginoso, lo adentran al ser del personaje principal.
“Juan Pablo Castel es un pintor recluido en prisión por el asesinato de María Iribarne. Durante su encierro rememora la cadena de acontecimientos que le llevaron a perder el control, a convertirse en un hombre con el interior oscuro, un hombre poseído por una insalvable soledad, la de la ausencia de la mujer amada hasta el límite, la del engaño que ha convertido su corazón en un pedazo duro y frío de hielo y ha colocado entre sus manos el cuchillo que pone fin al sufrimiento.Obra esencial de Sabato, que Albert Camus refrendó ante la crítica mundial, El Túnel nos entrega los elementos básicos de su visión metafísica del existir.”
No tengo por costumbre llevarle contraria a reputados escritores y con algo de incomodidad que Juan Pablo Castel calificaría de falsa modestia, admito que La Peste ha estado entre mis lecturas pendientes desde hace mucho tiempo. Pero volviendo al tema, concuerdo con la opinión del Sr Camus.
El libro comienza con una confesión, un asesinato y de ahí se desprenden los hechos en una cadena que lleva a un destino anunciado en la primera página, y que con el acercamiento al final se hace inevitable. ¿Por qué leer hasta el final lo que sabemos desde el principio? Curiosidad y Castel lo comprende completamente.
Juan Pablo Castel es una persona que no espera nada bueno de la humanidad, no espera comprensión porque la humanidad para él es previsible tan vacía como la soledad absoluta que siente y que plasma en su pintura, en esa última pintura presenta su alma, presenta su exposición más intima, lo hace con el conocimiento de que un mundo tan previsible y acostumbrado a las banalidades no reconocerá un sentimiento así de profundo. Hasta que ella lo hace, ella representa una pequeña porción del mundo, así como la imagen del alma de Castel representa tan solo un pequeño espacio de la gran pintura.
El libro consta de 155 páginas, sin embargo en las primeras páginas el narrador concede permiso para dejar la lectura “el que quiera dejar de leer la narración en este punto no tiene más que hacerlo; de una vez por todas le hago saber que cuenta con mi permiso más absoluto” En mi opinión más escritores deberían hacer esto, así libran a los lectores del cargo de conciencia que en ocasiones representa abandonar la lectura de un libro (más de un autor reconocido).
El túnel es un libro de culto de la literatura latinoamericana, una narración intensa que revela como el interior del ser transmuta hasta llegar a oscuros parajes, cómo el túnel que a veces nos rodea se vuelve la vida entera hasta dejar el alma sumida en oscuridad.
“la frase «todo tiempo pasado fue mejor» no indica que antes sucedieran menos cosas malas, sino que –felizmente- la gente las echa en el olvido.”
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